Es una trama que raramente abordan sus ficciones y que tiene que ver con reclamos laborales, salariales, y con el reparto de la riqueza. Un relato por ahora en pausa ya que los guionistas y actores se declararon en huelga, alegando la intransigencia de las grandes productoras a negociar.
En Hollywood se desarrolla una trama que raramente abordan sus ficciones y que tiene que ver con reclamos laborales, salariales, y con el reparto de la riqueza. Por ahora el relato está en pausa, ya que los guionistas y actores se declararon en huelga, alegando la intransigencia de las grandes productoras a negociar. Lo cierto es que ambas partes conforman una película que nunca imaginaron.
Primero decidieron parar los guionistas (agrupados en la WGA), y días después de sumaron los actores (SAG-AFTRA). Del otro lado se encuentra la AMPTP, la alianza de productores de cine y TV.
El conflicto tomó notoriedad en las redes sociales especialmente a partir del discurso de Fran Drescher, la titular del gremio de actores, que se viralizó rápidamente. Drescher, claro, recordada por la sitcom noventosa "La Niñera", donde además de protagonizar fue guionista, fue durísima con la parte empresarial.
“Estamos siendo victimizados por una entidad realmente codiciosa. Estoy sorprendida por la forma en que las personas con las que hemos estado trabajando, nos están tratando. No puedo creer lo lejos que estamos en tantas cosas”, planteó.
En dirección a los CEOS, señaló: “Cómo alegan pobreza, que están perdiendo dinero, a diestra y siniestra, cuando dan cientos de millones de dólares a sus directores ejecutivos. Es repugnante. Qué vergüenza para ellos. Están del lado equivocado de la historia”. Lejos del charme de la Nanny que cautivó al señor Sheffield.
Los motivos de una huelga con pocos antecedentes
¿Pero cuáles son las razones de un conflicto que podría prolongarse por meses, y que tiene el apoyo de estrellas como Susan Sarandon, Matt Damon, Jude Apattow y tantos otros? ¿Qué es lo que realmente se discute?Lo primero a mencionar es lo mucho que cambió la industria por los avances tecnológicos. Más precisamente, el streaming, ese contenido en vivo o grabado que se puede ver en tiempo real. Hablamos de podcast, webcast, películas, shows de tv, videos musicales, etcétera.
El planteo no parece ilógico: no hay ninguna claridad sobre las comisiones que se reciben o recibirán sobre las series o películas exitosas en estas nuevas plataformas. Las mismas, por caso, no informan las vistas de una producción. ¿No debería cobrar “regalías” un actor cuya serie estalla en Netflix? ¿Y de cuánto estamos hablando?
Primero los guionistas, luego los actores
Los guionistas fueron los primeros en parar. Mejores sueldos y mayor certeza de ser contratados, es el reclamo. Según se refiere, es una profesión que “de planta”, pasó a ser freelance, a caballo del modelo del outsourcing (la subcontratación o tercerización).Pero no sólo eso: los grandes estudios quieren utilizar Inteligencia Artificial para crear guiones más rápido. Es decir, el trabajo de los guionistas pasaría a ser revisar estos textos, creados tecnológicamente. Esto genera una gran incógnita sobre sus ingresos. Pensemos: si se le paga a un escritor por un guión, y luego se utiliza ese material como base para que la IA genere un nuevo texto, destinado a una nueva producción, ¿el guionista tendria derechos sobre este último? ¿Habría regalías, comisiones?
Del lado de los actores, los cuestionamientos no son menores. Se apunta un caso concreto: durante la pandemia, Scarlett Johanson demandó a Disney, porque no le avisó que Black Widow iba a tener un estreno simultáneo en Disney Plus y en cines. Esto afectaría el salario que ella recibiría por la taquilla.
Los artistas también quieren opinar sobre el uso de la Inteligencia Artificial. Es decir, cómo se va a utilizar y manipular su imagen y voz. Si a partir de esta innovación, no tendrán necesidad de llamarlos para otros proyectos, para sólo utilizar las imágenes grabadas anteriormente. Y en ese caso, qué pasará con los derechos de imagen.
Del lado de las productoras, hasta el momento no hay mucho más que intransigencia. Se aceptó subirles el chachet diario de los extras a 265 dólares, pero quedándose con los derechos de imagen. Así, pueden replicarlos en diferentes producciones. El extra que aparece, pongamos, cruzando una calle, podría ser usado en otros contextos. ¿Serían 265 dólares, “por única vez”?
Un conflicto que registra antecedentes
No es el primer conflicto en Hollywood por la aparición de nuevas tecnologías, y cómo nos repartimos ese nuevo mercado que aparece. Se recuerda la huelga de 1980, que duró 3 meses y 3 días, y tuvo que ver con la llegada de las videocaseteras. En ese momento, se pedían comisiones por repetición de series y películas en la incipiente TV por cable, y por las ventas de VHS.Otro paro de guionistas tuvo lugar en 2007, cuando comenzaron a explotar los contenidos en internet y se generó un temor a la reducción de escritores. De aquella medida, quedó una anécdota significativa: "Quantum of solace" (estrenada en 2011), la segunda de James Bond con Daniel Craig como protagonista, fue afectada por la medida. El propio Craig adjudicó el fracaso a que el texto tuvo que ser terminado por los propios actores.
El streaming, ¿una estrella o una burbuja?
El streaming podría haber llegado a su punto máximo de expansión. Hasta el momento, las plataformas venían invirtiendo enormes sumas de dinero. Netflix, a la cabeza, incursionó en las producciones originales, contratando a apellidos de la talla de Martin Scorsese. Similar ambición tuvieron HBO Max, Prime Video, Disney Plus, Star Plus, y siguen las firmas.En algún momento, la burbuja estalló. En 2022, Netflix anunció la pérdida de suscriptores: había dejado de crecer. Paramount ese año dio pérdidas por 500 millones de dólares. En 2023, Disney tiene pérdidas por 2.4 millones de suscriptores... El streaming no es la mina de oro que se pensaba. Claro, esto derivó en recortes, despidos y cancelaciones.
Los empresarios están confiados, por una certeza. Este nuevo modelo de trabajo genera series más cortas, por lo que se trabajan en su totalidad antes de producirse. Esto hace que haya muchas que ya pasaron por la etapa de guión-actuación, y resta la post producción, no afectada por el conflicto. Es decir, especulan con que pasará mucho tiempo hasta que se note que hay un paro. Por eso tambien sería larga la medida: quieren negociar en octubre o noviembre, cuando los huelguistas estén más necesitados de llegar a un acuerdo. Es decir, con los bolsillos flacos.
Pero, igualmente, estamos hablando de una industria clave, que según estimaciones de medios locales, podrían tener una pérdida de 4 mil millones de dólares, lo que naturalmente afectará la economía del sector, del estado de California, e incluso de los Estados Unidos.
Los actores se defienden y hablan -como dijo Fran Drescher- de la altísima inequidad entre ejecutivos y trabajadores. Citan una cifra: el principal ejecutivo de Hollywood ganó 498 millones de dólares en los últimos 5 años, lo que significa 384 veces más que el escritor promedio.
Las películas y series que se verán afectadas
Son muchas las producciones que se han parado por esta huelga de actores y guionistas. Algunos de los tanques que estaban en producción y quedaron en espera son "Ghostbusters 4", "Mufasa: The Lion King", y "Avatar" 3 y 4. Se indicó que, si bien los guiones para estos proyectos están hechos en la mayoría de los casos, la huelga de los artistas los frenará.También se menciona a "Deadpool 3", protagonizada por Ryan Reynolds y Hugh Jackman. Esta tercera entrega de la franquicia de antihéroes de Marvel tenía fecha de estreno para mayo de 2024, pero la huelga seguramente arruinará esa proyección.
Además, se menciona la secuela de "Beetlejuice", a cargo de Tim Burton y con Michael Keaton y Winona Ryder, una adaptación cinematográfica del musical Wicked (con Ariana Grande), y la octava entrega de Mision imposible, siempre capitaneada por Tom Cruise (protagonista y productor).
Así puede entenderse que se hayan desplomado un 64% los permisos de filmación para cine y TV en el área de Los Ángeles, en comparación con julio de 2022, según citó FilmLA.
Pero la huelga puede afectar incluso las producciones extranjeras, como la secuela de "Gladiator", protagonizada por Paul Mescal y Denzel Washington y filmada en Marruecos y Malta.
Finalmente, la medida aplica a los filmes terminados, y que ya no serán publicitados por los actores, los que desistirán de las campañas de promoción, ruedas de prensa o presencias en alfombras rojas.
Es difícil conjeturar qué pasará en esta trama en la que se conjugan arte, relaciones laborales e innovaciones tecnológicas. Como en una película de autor, no se avizora el fin.
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