El adiós al "Rey de la bailanta", Raúl Guzmán

Acaban de informarnos la desaparición física de un grande, del inolvidable Raúl Guzmán.

Comenzó  su carrera en radio en el fulgor de las mal llamadas "FM truchas", conduciendo programas de música latina y también retro. Pero sin lugar a dudas se convirtió en leyenda radialmente hablando cuando fue convocado por el recordado boliche "Santiago Querido" de Burzaco, primero para conducir "Tarde Tropical", el programa producido por el local, y posteriormente, ante el descomunal éxito, para animar las noches del boliche. Así lo proyectaron desde FM Venus 88 de dicha localidad, a varias decenas de radio de toda la zona sur. También fue el primer animador de "Maracana Bailable", el mítico boliche de la rotonda de Burzaco.

El año pasado, realizando nuestro especial solidario "El Siglo" en Duplex 2019 -programa que se emite en simultáneo por FM Tiempo y Geminys Radio-, tuvimos el honor de tenerlo como invitado, pudimos revivir grandes momentos de la historia de la radio zonal y pasar una gran jornada en vísperas de Navidad.

Raúl ya venía con problemas de salud y lamentablemente, luego de su participación en el programa, perdió totalmente su visión -tan sólo dos días después-. A partir de allí, comenzó su gran debacle y despuntó su sueño con volver a conducir un programa, que pudo cumplir brevemente, por sólo tres días, hace apenas unas semanas, cuando debieron cancelarlo por enfermedad de su locutora. Para aquellos que lo conocimos, la familia de radio, y también a su familia, mandamos nuestras sinceras condolencias.

Sin lugar a dudas, "El Pelado" Guzman es una de las leyendas de la radio vernácula, que nadie debería olvidar.

Mi recuerdo de "El Pelado" Guzmán

Por Lisa Lain

Había llegado con muchas expectativas a la radio FM Tiempo, ya que realizaría el programa especial de fin de año "El Siglo" que se transmite en dúplex por esa emisora y Geminys Radio, junto a mi colega Gustavo da Silva y Eduardo Rochia. Allí conocí al "Pelado" Guzmán, charlamos de muchas cosas, hacía muchísimo calor, era vísperas de fiesta y le ayudé a servirle un vaso de agua fresquita, porque él prácticamente ya no veía.

Después de compartir ese programa, me enteré que había perdido completamente la visión. Y ahora me llegó la triste noticia que se fue de viaje para siempre.

Me quedo con la imagen de un ser cordial, un caballero con muchas anécdotas y que hizo mucho por la cultura local y brindarle una identidad a nuestra querida -y olvidada- zona sur.
Buen viaje y que en emisiones eternas descanses.